Cuanta falta hace una madre de Rafael Ulpier
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Cuanta falta hace una madre de Rafael Ulpier
Hoy en la soledad de mi cuarto
en el que solo vivo sin compartir con nadie
me he puesto a analizar mi vivir
y he tenido por fuerza que admitir
cuanta falta hace una madre.
Recuerdo tantos años atrás en mi niñez
si enfermaba o por pequeña herida brotaba sangre
mi madre acudia en mi ayuda muy sublime
y con su ternura pregunta: Te duele mucho?
dime, Señor, cuanta falta hace una madre.
Y mi imaginacion siguió viajando
a través de los años hasta llegar a grande
y aun en los años de mocedad ella solía cuidarme
si la ropa estaba limpia, si me veía elegante
hay mi Dios, cuanta falta hace una madre.
Si por mala suerte la novia perdía
y la tristeza a mi Corazón llegase
su regazo de Consuelo me servía
por eso hoy pienso en mi actual agonía
cuanta falta hace una madre.
Si, hoy vivo en amarga soledad
con un dolor que consejo alguno pare
y es en ella en quien puedo pensar
no la puedo escuchar ni su rostro acariciar,
hay cuanta falta hace una madre.
Si la tuviera hoy a mi lado
su consejo seria el mas mitigante
su ternura mi dolor aplacaría
y su regazo mis lágrimas acogerian,
que dolor, cuanta falta hace una madre.
Rafael Ulpier
1-30-2004
Derechos Reservados.
en el que solo vivo sin compartir con nadie
me he puesto a analizar mi vivir
y he tenido por fuerza que admitir
cuanta falta hace una madre.
Recuerdo tantos años atrás en mi niñez
si enfermaba o por pequeña herida brotaba sangre
mi madre acudia en mi ayuda muy sublime
y con su ternura pregunta: Te duele mucho?
dime, Señor, cuanta falta hace una madre.
Y mi imaginacion siguió viajando
a través de los años hasta llegar a grande
y aun en los años de mocedad ella solía cuidarme
si la ropa estaba limpia, si me veía elegante
hay mi Dios, cuanta falta hace una madre.
Si por mala suerte la novia perdía
y la tristeza a mi Corazón llegase
su regazo de Consuelo me servía
por eso hoy pienso en mi actual agonía
cuanta falta hace una madre.
Si, hoy vivo en amarga soledad
con un dolor que consejo alguno pare
y es en ella en quien puedo pensar
no la puedo escuchar ni su rostro acariciar,
hay cuanta falta hace una madre.
Si la tuviera hoy a mi lado
su consejo seria el mas mitigante
su ternura mi dolor aplacaría
y su regazo mis lágrimas acogerian,
que dolor, cuanta falta hace una madre.
Rafael Ulpier
1-30-2004
Derechos Reservados.
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